El embajador de Cuba, Gustavo Machín, en compañía del alcalde de Coslada, Ángel Viveros, inauguró en la tarde de ayer la muestra de fotografía ‘La Habana, su gente, su vida’ de Cristina Romero, que constituye un homenaje a los 500 años de la creación de La Habana. A la inauguración acudieron, además, la concejala de Cultura y Festejos, Emi Escudero; la consejera comercial de la Embajada de Cuba en Madrid, Janet Fernández y la consejera cultural, Natasha Díaz-Argüelles, así como distintos miembros de la Corporación municipal cosladeña.
Viveros, manifestó «la voluntad del equipo de gobierno municipal de retomar los proyectos de cooperación internacional. Desde el año 2000, nuestra ciudad tiene un acuerdo de hermanamiento con la población cubana de San José de las Lajas. Los españoles estamos unidos a Cuba, por la historia, por las raíces, por la cultura, por las costumbres. Pero también nuestra ciudad mantiene lazos de sincera y fraterna relación de amistad».
Y, por su parte, el Embajador de Cuba en España, Gustavo Machín, incidió en «la importancia de la cooperación entre ambas naciones porque supone el acercamiento, el conocimiento y el enriquecimiento cultural. Ahora que se cumplen 500 años de la fundación de la ciudad de La Habana es buen momento para seguir estrechando lazos«.
Cristina Romero, autora de la exposición, ya ha exhibido su obra en Madrid, Orense y Nueva York. ‘La Habama, su gente, su vida’ es una recopilación de imágenes de la ciudad en las que se reflejan, a la par, la cotidianeidad y el ambiente antiguamente majestuoso y ahora algo decadente.
El poeta español Luis García Montero ha querido mostrar su admiración hacia la obra de Cris y ha escrito sobre ella: »la mirada de Cris Romero sobre La Habana elige la lentitud. Los edificios, las perspectivas, los rostros, los rumores labran con lentitud un tiempo de espera. Cris Romero consigue que la realidad que fotografía le devuelva la mirada. Y eso es el mayor logro de una artista, conseguir que la ciudad sea la que mire con atención a los ojos que la están fotografiando. Por eso la lentitud se carga de significación, de complicidad. La vida más íntima de la ciudad establece una conversación sin mediar palabra. La mirada crea huecos, puertas, espacios de sombra y de luz, balcones, terrazas, pasos, signos por donde se cuela la vida con sus melancolías y sus destinos…».
La exposición podrá visitarse hasta el 26 de septiembre en el nuevo centro cultural de La Rambla.