La Policía Nacional detuvo el pasado sábado en Alcobendas a un hombre de nacionalidad dominicana y 32 años, que portaba un cuchillo y que, presuntamente, había huido de su domicilio tras maltratar a su pareja a la que encontraron los agentes encerrada en una habitación. En el transcurso de la intervención los agentes fueron atacados por un perro de raza peligrosa, propiedad del arrestado.
Los policías recibieron un aviso de los vecinos tras escuchar »una fuerte discusión de una pareja y golpes’‘. Cuando los policías llegaron al domicilio llamaron a la puerta y salió ladrando a los agentes un perro de raza American Stanford, considerado PPP (perro potencialmente peligroso). En ese momento salió gritando y de manera agresiva un hombre con un cuchillo en la mano derecha. Los agentes le reiteraron varias veces que tirase el arma blanca pero no hizo caso, adquiriendo cada vez más una actituc agresivo e incluso intentando herir a los agentes.
Uno de los policías se abalanzó sobre el agresor y se produjo un forcejeo entre ambos. El policía realizó una técnica de defensa personal sobre el cuello del detenido, produciéndose en ese momento la fractura del cuchillo. En ese momento el perro, alentado por el presunto agresor, se abalanzó sobre los agentes y les trató de morder. Los policías al intentar repeler la agresión del animal no pudieron evitar que se escapase el supuesto maltratador. Este huyó hacia el Parque Blanco y la calle Concilio, blandiendo en todo momento un cuchillo en su mano.
Finalmente, el agresor fue rodeado y reducido en la calle de Concilio de Alcobendas. Los agentes pudieron, también, localizar al perro, que fue trasladado a una protectora de animales.
Más tarde, la Policía acudió a la casa donde vivía el detenido y encontraron a una mujer que se había encerrado en el baño para protegerse de la agresión del arrestado. Sin embargo, la mujer se resistió a ser trasladada a un centro de salud pese a la lesiones que tenía y también se negó a presentar denuncia por un presunto delito de malos tratos. La supuesta víctima señaló que toda la presunta agresión se había producido delante de su hijo de 12 años.