La Policía Nacional ha desarticulado en Madrid una organización criminal dedicada al tráfico ilícito de vehículos. Los agentes han detenido a un total de nueve personas en Alcorcón (Madrid) y han practicado cuatro registros en dos domicilios de la misma localidad y de Valdemoro, además de en dos naves de Ocaña (Toledo) y Valdemoro.
Los automóviles robados eran despiezados, en su mayoría, y enviados en furgonetas a Polonia, donde contaban con la infraestructura necesaria para dar salida a la mercancía. Además, la investigación ha contado con la colaboración de la Agregaduría de Interior de España en Polonia.
DOS NAVES PARA EL DESPIECE
La investigación se inició a finales de 2018 cuando los agentes tuvieron conocimiento de que en el distrito madrileño de Hortaleza habían interceptado un vehículo, circulando a gran velocidad, con dos ocupantes en su interior a quienes les constaban numerosos antecedentes por robo de vehículos. También les intervinieron diversos útiles que, generalmente, son empleados para este fin.
Tras las primeras gestiones, los agentes observaron que los investigados acudían con frecuencia a una nave situada en Ocaña (Toledo). Además, en las inmediaciones de la nave detectaron una furgoneta que, presuntamente, estarían utilizando para transportar al extranjero piezas de los vehículos sustraídos.
En fechas posteriores, los investigadores tuvieron conocimiento de que dicha furgoneta había sido inspeccionada en un control policial, en el peaje de la antigua autopista AP-1. Entre su carga localizaron cuatro motores, cajas de cambios de vehículos con todos los números limados o manipulados, cuatro capós, defensas, amortiguadores y espejos de una marca y modelo concreto. Además, los agentes descubrieron que la organización disponía de una segunda nave en Alcorcón.
Con el avance de la investigación, los agentes constataron que la organización estaba formada por varios miembros de origen polaco, de una misma familia, que se dedicaban a la sustracción de vehículos que eran despiezados, en su mayoría, y posteriormente enviados en furgonetas a Polonia, donde contaban con la infraestructura necesaria para dar salida a la mercancía. Para ello, hacían uso de facturas falsas de compra de material de desguace así como de documentación falsificada, bajo el amparo de empresas pantalla, motivo por el que simulaban la lícita procedencia de los artículos que transportaban.
Los investigadores observaron que la organización estaba perfectamente estructurada y que los detenidos ejercían, dentro de la misma, una función determinada en la que se habían especializado. Por un lado, estaban los que se dedicaban a la sustracción de los vehículos. Por otro, los encargados de alterar sus elementos identificativos y de realizar los despieces. Otros miembros de la organización proporcionaban material logístico y de venta y, por último, estaban aquellos que se ocupaban del transporte a diferentes países de África y Europa. Los investigados, además, funcionaban bajo el amparo de empresas pantalla que les otorgaban una apariencia legal.
Además, los agentes descubrieron que los investigados también se dedicaban a la sustracción de vehículos todoterreno por encargo para, posteriormente, venderlos a ciudadanos de Marruecos y trasladarlos a la zona del Campo de Gibraltar. Allí este tipo de vehículos son utilizados por las organizaciones dedicadas al tráfico de drogas para transportar las sustancias estupefacientes. Concretamente, en la provincia de Málaga, los agentes recuperaron dos todoterreno que habían sido llevados hasta allí por conductores que la organización había contratado.
15 ROBOS Y 600.000 EUROS
En la última fase de la investigación, los agentes tuvieron conocimiento de que la organización criminal había sustraído un vehículo en Parla que, posteriormente, fue localizado en Pinto. El seguimiento del coche llevó a los investigadores hasta Alcorcón, donde se realizaron las detenciones de todos los miembros de la organización así como parte de los registros. El principal investigado intentó escapar a bordo de uno de los vehículos sustraídos, a gran velocidad, perdiendo el control del coche e impactando contra una valla metálica, momento en que lograron arrestarlo.
A los nueve detenidos se les imputa la comisión directa de 15 robos de vehículos así como los delitos de pertenencia a organización criminal y falsedad documental. El perjuicio económico estimado asciende a casi 600.000 euros.
En los cuatro registros practicados –en dos domicilios de Alcorcón y Valdemoro, y en dos naves de Ocaña (Toledo) y Valdemoro- los agentes han intervenido un juego de troqueles para la falsificación de placas de matrícula, centralitas y sofisticado material destinado a facilitar la sustracción de vehículos. Además, también han localizado numerosa documentación falsificada, facturas, tarjetas de ITV en blanco, llaves maestras y extractores de bombines. La investigación, que ha contado con la colaboración de la Agregaduría de Interior de España en Polonia, sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.