¿Tienes 18 años o más y quieres estudiar? Aquí te decimos cómo

Los Centros de Educación de Personas Adultas (CEPA) son instituciones educativas a las que se puede acceder a una enseñanza adaptada a las características de la persona adulta, con horarios de mañana, tarde y noche, compatibles con la vida familiar y laboral. Se encuentran en casi todos los distritos y municipios de Madrid, y se cifran en unos 70 en toda la región.

Tienen como finalidad realizar actuaciones de carácter educativo, orientadas a proporcionar al alumnado mayor de 18 años la posibilidad de completar o ampliar su formación académica, el acceso a los distintos niveles educativos y profesionales, y la  integración, promoción y participación en el mundo social y laboral.

Este año podrán matricular las personas que, a 31 de diciembre de 2024, tengan 18 o más años, y de manera excepcional, mayores de 16 años.

El plazo de presentación estará abierto hasta el 13 de septiembre, para el alumnado ya matriculado en un CEPA, con reserva de plaza, y para el alumnado nuevo que quiere incorporarse (sin reserva de plaza). El 15 de septiembre será la publicación de las listas definitivas de admitidos y excluidos, del 16 al 17 de septiembre la matriculación, y el 18 de septiembre el inicio de las actividades lectivas.

La oferta formativa va desde idiomas, informática, ampliación cultural y robótica, hasta ESO y cursos de preparación para la prueba de acceso a la universidad (mayores de 25 años).

¿Por qué y para qué estudiar en un CEPA?

El alumnado que se matricula en CEPA acude bajo múltiples circunstancias. Los más jóvenes lo hacen porque en el IES no pudieron continuar, y se matriculan para terminar sus estudios y titularse de la Secundaria.

Los más mayores lo hacen para continuar los estudios que alguna vez no pudieron terminar y buscan en un CEPA una solución a través de una recualificación académica por necesidades diferentes. El mayor motivo es que en su lugar de trabajo se les demanda mayor titulación a la que accedieron en su día.

Otra causa es porque los hijos ya son grandes y, en su día, no pudieron terminar de estudiar y ahora están en el momento para continuar. Luego están aquellas personas que necesitan el título porque quieren acceder a un Ciclo Profesional de Grado Medio, o con un objetivo más propedéutico, para seguir estudiando en alguna modalidad de Bachillerato y luego acceder a un Ciclo Profesional de Grado Superior, e incluso acceder a la Universidad.

También está el alumnado migrante que quiere reconocer sus estudios en el Sistema Educativo Español.

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