El 42º Rallye Dakar, primero que se disputa en Asia, supuso un nuevo éxito para el deporte de motor español. El madrileño Carlos Sáinz y el barcelonés Lucas Cruz sumaron el tercer triunfo, en su octavo Dakar juntos.
Con esta victoria, Sáinz lograba la décima absoluta de un piloto español en la gran carrera-aventura; tras las 5 conseguidas en moto por Marc Coma y las 2 logradas por Joan ‘Nani’ Roma, una en moto y otra en coche.
Carlos y Lucas protagonizaron un rallye excepcional, en el que tomaron el mando en la tercera etapa y hasta el final, dominando en las especiales decisivas y manteniendo bien la posición en las jornadas adversas. El piloto sumó 4 victorias parciales en esta edición, que ya suponen 36 en su carrera desértica, y cruzó la línea de meta árabe tras 42 horas, 59 minutos y 17 segundos contra el crono.
El nuevo triunfo de Sáinz con el Mini X-Raid buggy se suma a los logrados en 2018, con Peugeot 3008 DKR Maxi, y en 2010, con Volkswagen Race Touareg 2. Carrera similar a la del mejor piloto en la historia del rallye y compañero de Carlos, el francés Stéphane Peterhansel, quien ganó 6 veces en moto con Yamaha y 7 más en coche con Mitsubishi (3), Mini All 4Racing (2) y con Peugeot 2008 DKR y Peugeot 3008 DKR, en 2016 y 2017 las dos últimas.
Las tres victorias de Sáinz y Cruz se han producido con motores de gasóleo. Los coches diésel dominan el Dakar desde que la prueba comenzó su andadura americana en 2009, abandonando África.
En la reciente edición del rallye en Arabia Saudí, el segundo mejor español en coches fue el copiloto Álex Haro, junto al sudafricano Giniel De Villiers -precisamente primer ganador del Dakar con un diésel-; siendo tercero el equipo formado por Fernando Alonso y Marc Coma (Toyota Hilux), decimoterceros de la general y primeros debutantes en coches.
El siguiente mejor conjunto español lo formaban otro excampeón madrileño de ralis, Óscar Fuertes, y el experto copiloto gallego Diego Vallejo, con el SsangYong Korando DKR.
Fuertes y Vallejo lograron una excelente 24ª posición absoluta, terminando séptimos en la categoría de automóviles de gasolina de 2 ruedas motrices y fabricando el mejor resultado en la historia de SsangYong Motorsport.
Las 53 horas, 59 minutos y 52 segundos contra el cronómetro invertidas por Fuertes y Vallejo en los casi 5.000 km. cronometrados de las 12 etapas árabes también constituían éxito, pues suponían completar el Dakar a 11 horas del ganador, cuando en su debut en 2018 finalizaron 30º de la general a 53 horas del propio Sáinz y en 2019 llegaron a meta con 29 horas más que el triunfador del rallye.
Una ostensible mejora que añadir al hecho de que Óscar, Diego y SsangYong se han mostrado infalibles: tres participaciones consecutivas en el Dakar y en las tres han visto meta.
El mérito personal del piloto madrileño -y del fisioterapeuta del equipo en carrera- fue, también, asumir la dureza de esta prueba, tras la rotura de menisco y ligamento cruzado de la pierna izquierda que le obligó a pasar por quirófano 15 días antes del rallye.
Además de estas actuaciones, también hay que destacar las de Nani Roma y el extrialero Daniel Oliveras (2º en mini buggies en 2019 junto a Gerard Farrés), que lograron llevar al joven automóvil Borgward BX7 DKR Evo a la posición 27ª; y la de la burgalesa Cristina Gutiérrez, 42ª absoluta junto a Pablo Moreno en el Mitsubishi Eclipse Cross, que suponía la cuarta vez consecutiva que hacía meta.
Este Dakar lo terminaron 58 automóviles, en 10 de los cuales había participación española.
Entre la legión de side by side (UTV de carreras o mini buggies), los mejores de casa fueron José Antonio Hinojo y Diego Ortega y el excampeón de ralis Chus Puras y Xavier Blanco, que acabaron quintos y sextos. En siete de los 31 equipos de SxS que acabaron hubo presencia española.
Y en motos, Joan Barreda (Honda) acabó séptimo -llegó a rozar el podio-, Jaume Betriu (FN Speed) fue el mejor debutante y 14º de la general, Joan Pedrero (LS2) fue 16º, Laia Sanz (GasGas) fue 18ª absoluta y de nuevo primer mujer, concluyendo su décimo Dakar consecutivo; y Sara García (Yamaha) hizo el pleno femenino español al completar la prueba y hacerlo en una buena 22ª posición dentro de la clase original, sin asistencia.
Fueron 12 los pilotos españoles entre los 96 que alcanzaron la meta.
Este Dakar de Arabia Saudí, de recorridos de gran belleza y altas velocidades que completaron el 69,3% de los participantes, también pasará a la historia por la primera victoria estadounidense, y por duplicado, con Ricky Brabec en motos y Casey Currie y Sean Berriman (Can-Am) en side by side. Además, el triunfo de Brabec devolvió el honor a Honda tras tres décadas de ausencia de éxito.
Lamentablemente, la prueba será recordada por la pérdida del piloto número 30 en la historia del rallye, el carismático portugués Paulo Gonçalves (Hero).