La máxima ayuda a particulares y autónomos asciende a 5.500 euros
Por Goyo Ybort
La segunda edición del Programa de Incentivos a la Movilidad Eficiente y Sostenible, o plan Moves II, fue aprobada el 16 de junio por el Consejo de Ministros, para conceder ayudas directas a las comunidades autónomas, Ceuta y Melilla.
La dotación de este programa es de 100 millones de euros (la edición anterior fue de 45 millones) y va dirigido a incentivar la compra de vehículos alternativos, instalar infraestructuras de recarga de automóviles eléctricos, fomentar sistemas de préstamos de bicicletas eléctricas e implantación de medidas de movilidad urbana sostenible para empresas o ayuntamientos.
Las ayudas de esta convocatoria del Gobierno español son cofinanciadas con el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) y serán las comunidades autónomas las que repartan el presupuesto asignado por el Estado. Madrid será la tercera región con mayor dotación, de 14,15 millones de euros (en el plan anterior fue de 6 millones); por detrás de Andalucía (17,95 millones) y Cataluña (16,12).
De esos totales, las regiones podrán destinar hasta un 70% a la compra de vehículos, ya que el resto debe aplicarse en la instalación de puntos de recarga de electricidad, así como en el incentivo de planes de trabajo de ayuntamientos.
A grandes rasgos, para un particular o autónomo, la ayuda podría llegar a los 5.500 euros siempre que se adquiera un automóvil eléctrico puro o uno híbrido enchufable (más de 90 km. de autonomía), también de pila de combustible de hidrógeno, y se entregue un coche de más de 7 años de vida. Caso de no entregar vehículo para chatarra, la subvención máxima asciende a 4.000 euros.
250 MILLONES PARA RENOVAR EL PARQUE DE AUTOMÓVILES
De los 3.750 millones (entre 2020 y 2021) de euros con que se dota al conjunto del plan de ayuda al sector de automoción, serán 250 los millones destinados a la renovación del parque entre particulares, autónomos y empresas. De ellos, 230 millones se dirigen a renovar turismos y vehículos comerciales y los 20 restantes para ayudar a cambiar vehículos industriales y autobuses.
Lo bueno es que se podrá adquirir un automóvil nuevo (turismo o comercial ligero), independientemente de que se alimente de gasolina, gasóleo, gas, electricidad, pila de combustible o sea híbrido; incluso un vehículo de Km.0 (usados de menos de 1 año, ya matriculados por los concesionarios y que han estado encerrados durante el confinamiento); y que las subvenciones pueden solicitarse desde el mismo 16 de junio de 2020.
Se premia el achatarramiento de los turismos de 7 o más años de antigüedad y la adquisición de un modelo cuyas emisiones de dióxido de carbono sean inferiores a los 120 gramos por kilómetro; y de las furgonetas que tengan 7 años y sean sustituidas por otras cuya emisión de CO2 sea inferior a 155 g/km.
A mayor eficiencia del nuevo vehículo, mayor ayuda. Así, en el caso de la compra de un turismo con etiqueta cero de la DGT, un particular o autónomo podría contar con hasta 4.000 euros. Si se trata de un etiqueta eco, las ayudas se ubican entre los 600 y 1.000 euros; y si es un catalogado como c (combustión), de entre 400 y 800 euros.
Las marcas de automóviles, además, han de realizar un descuento adicional por el mismo importe que la ayuda del Gobierno, salvo en los vehículos de etiqueta cero, en cuyo caso el descuento extra será de 1.000 euros.
De este modo, los compradores particulares o autónomos podrán disponer de un máximo de subvención de entre 800 y 5.000 euros. Y, si el coche que se achatarra supera los 20 años de vida; si el comprador tiene movilidad reducida o si pertenece a un hogar con ingresos mensuales inferiores a los 1.500 euros, la ayuda por compra se amplía en 500 euros más.
El importe de los turismos no podrá superar los 35.000 euros, para poder disfrutar de la subvención; siendo el tope de 45.000 euros para los casos de personas con movilidad reducida o de vehículos con etiqueta cero. Cantidad que asciende hasta los 53.000 euros para automóviles de ocho plazas o en el caso de que el destinatario último sea una administración o entidad sin ánimo de lucro.
Para las pymes, las ayudas contempladas ascienden a 3.200 euros para los cero, de entre 500 y 800 euros para los eco y de entre 350 y 650 euros para los c; en tanto que las grandes empresas podrán contar con 2.800 euros en el primer caso, entre 450 y 700 en el segundo y entre 300 y 550 euros en el tercero.
En lo referente a la adquisición de comerciales ligeros de hasta 2.500 kg., se incentivan las de vehículo cero con entre 2.800 y 4.000 euros, las de eco entre 850 y 1.200 euros y las de los c con entre 700 y 1.000. Y de comerciales pesados, de entre 2.800 y 4.000 euros (cero), 1.900 y 2.700 euros (eco) y de entre 1.500 y 2.100 euros (c).
En la renovación de vehículos industriales y autobuses, las ayudas oscilarán entre los 2.000 y los 4.000 euros, con límite de un vehículo por beneficiario y de 30 unidades para personas jurídicas.
La cuantía total para la renovación del parque de automóviles se eleva a 550 millones, pues también se contemplan sendos paquetes, de 100 millones cada uno, para que tanto el Estado como los ayuntamientos actualicen sus flotas con vehículos no contaminantes o de bajas emisiones. Estos programas se integran en el grupo de medidas a corto plazo, que ascienden a 1.535 millones y se movilizarán durante 2020. Los restantes 2.215 millones, hasta los 3.750 millones de la dotación global aprobada, van destinados a actuaciones en 2021 y años posteriores.
Si echamos una mirada a dos de los otros grandes productores, europeos y mundiales, de automóviles, vemos que tanto Alemania (primer productor europeo) como la vecina Francia (tercer productor europeo, por detrás de España) han focalizado sus ayudas en la compra de vehículos electrificados.
El Gobierno de Alemania aprobó un plan para el sector de la automoción que alcanza los 11.700 millones de euros, de los que 2.200 millones se destinan al incentivo para adquirir vehículos cero emisiones y flotas de vehículos eléctricos; 2.500 millones para el desarrollo de infraestructuras de recarga y la producción de baterías, y 7.000 millones de euros para fomentar el hidrógeno.
Fuera de este plan se han quedado los automóviles con motores de combustión interna, gasolina o diésel, que, sin embargo, se beneficiarán de una reducción de 3 puntos en el IVA, pasando del 19% al 16%.
Por su parte, el Gobierno de Francia contempla un plan de ayudas de algo más de 8.000 millones de euros a la industria del automóvil, de los que 7.000 millones irán destinados a la producción de vehículos eléctricos en el propio país en los próximos cinco años, y otros 1.000 se destinan a incentivar la demanda; con claros objetivos puestos en ese aumento de ayudas para adquirir un coche eléctrico, en acelerar la instalación de cargadores públicos para vehículos enchufables para expandir la infraestructura y en convertir a Francia en el principal fabricante europeo de coches híbridos y eléctricos.
El Estado francés ofrece una subvención de 7.000 euros para los particulares que compren un coche eléctrico, siendo de 5.000 euros para las empresas; y de 2.000 euros si se trata de un híbrido enchufable. También habrá una ayuda para familias de bajos ingresos que podrán cambiar su antiguo automóvil diésel o gasolina por otro menos contaminante, con descuento de 3.000 euros si eligen vehículos de motores térmicos y de 5.000 euros si el elegido es un eléctrico. Esta especial y temporal ayuda concierne a un contingente de 200.000 vehículos.
BUENA ACOGIDA DEL PLAN POR PARTE DE LA AUTOMOCIÓN
Las grandes asociaciones del sector del automóvil han celebrado el denominado plan de impulso de la cadena de valor de la industria de la automoción, presentado por el presidente del Gobierno, quien anunció las líneas del plan Moves 2020 y del programa de renovación del parque móvil, el lunes 15 de junio; y que aprobó el Consejo de Ministros el martes 16.
El sector, que es el tercero industrial del país, viene de caer a mínimos históricos con la peor cifra de matriculaciones de la serie histórica (sólo equiparables a los pésimos datos de septiembre de 2012), tras una caída del 54,2%, sólo en turismos, en los cinco primeros meses de este año.
Por ello, el conjunto de asociaciones ha agradecido ese respaldo gubernamental, que contará con una dotación de 3.750 millones de euros, esperando que las ayudas se materialicen cuanto antes.
El plan, según las organizaciones, viene a reconocer “la importancia del sector de la automoción como tractor de la economía y hacer frente, primero, a los impactos negativos de la crisis pero con una visión estratégica a medio plazo, sentando las bases de la transición hacia la movilidad del futuro”, tal y como lo ha anunciado el presidente Sánchez en la presentación en la Moncloa.
Este anuncio pone de manifiesto el compromiso mutuo entre el país y las empresas de la automoción para impulsar la competitividad de la industria y el sector, lo que se traduce como óptimo mensaje ante los inversores internacionales, de cara a continuar acaparando proyectos y adjudicaciones para ratificar el avance en los compromisos de descarbonización y digitalización. El plan interviene en toda la cadena de valor para apoyar una transición hacia la movilidad sostenible, que potencie al sector y su competitividad.
Las asociaciones, no obstante, indican que “es necesario seguir trabajando en conjunto a partir de aquí para materializar las acciones cuanto antes. La rapidez será clave para reactivar cuanto antes el mercado, recuperar el ritmo de producción y reducir los impactos de la crisis, evitando que se penalice a la economía“.
Así, el presidente de Anfac (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones), José Vicente de los Mozos, resaltó que este plan de apoyo a la cadena de valor “recoge buena parte de las necesidades que tiene la industria a corto plazo, para superar esta crisis como es la renovación del parque o el impulso a la movilidad eléctrica pero también acoge el compromiso y estrategia que, como fabricantes, reflejamos en nuestro Plan AUTO 2020-40, presentado al Gobierno el pasado 2 de marzo. La clave está ahora en la rapidez de la aplicación de las medidas, que este plan se implemente de manera sencilla y rápida para garantizar su eficacia. Las marcas de automoción en España son claves para la recuperación de la economía y necesitamos la activación rápida del mercado para recuperar el empleo y dinamizar de nuevo fábricas y ventas”.
La presidenta de Sernauto (Asociación Española de Proveedores de Automoción), María Helena Antolín, quien también agradeció el plan al Gobierno, puso en valor el trabajo de unidad y coordinación con el resto de las asociaciones y los sindicatos. “Para los proveedores de automoción, que invertimos más del 4% de nuestra facturación en I+D+i, es prioritario incentivar fiscalmente la innovación en procesos, una medida que será una palanca muy efectiva para el sector para avanzar con pie firme y decidido en la transición tecnológica y ecológica, a través del desarrollo de nuevos procesos y permitiría atraer más modelos a España y a los proveedores seguir siendo competitivos”.
Gerardo Pérez, presidente de Faconauto (Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción), declaró: “Este plan va a dar muy buenas noticias. Va a hacer que las redes de concesionarios recuperen todo el empleo, a todos los profesionales que ahora están en ERTE. Es ordenado, justo y refuerza nuestro compromiso con el medioambiente, sin dejar de lado ninguna tecnología. De esta manera, los concesionarios estaremos en disposición de mantener los 161.500 puestos de trabajo que generamos, para lo que también comprometemos nuestras inversiones productivas y en formación para los próximos años en toda la geografía nacional“.
Raúl Palacios, presidente de Ganvam, (Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios) ha reconocido que “este plan de impulso supone reconocer al sector automoción como una prioridad y permitirá mantenerlo vivo después del shock que ha supuesto el coronavirus gracias a una estrategia de reactivación ambiciosa a corto plazo. Estamos hablando de la mayor dotación económica unitaria que se le concede a un programa de renovación desde 2012 y respetando el principio de neutralidad tecnológica que tanto hemos defendido, incluyendo el seminuevo y con ayudas adicionales para que las rentas más bajas también puedan acceder a un vehículo eficiente. Ahora bien, es importante que tal y como se ha dicho se activen desde ya para que el mercado pueda recuperar el pulso cuanto antes y generar un efecto positivo en cadena sobre la economía y el empleo“.
Y el director general de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive), Arturo Pérez de Lucia, también presente en el anuncio del Gobierno, ha dicho: “En el panorama del debate industrial, del debate económico, del debate de servicios públicos, de movilidad, de evolución de valores y de evolución de negocio en los próximos años en España, el Plan que hoy nos presenta el Gobierno es, en sí mismo, una declaración de principios y una visión clara de hacia dónde vamos, hacia dónde debemos ir y cuáles son los desafíos que tenemos por delante en la Automoción y en la Movilidad”.