- Entrevista con Carlos Bustillo Del Río, Presidente de la Asociación Madrileña de Distribuidores de Automóviles (AMDA). Por Goyo Ybort
“Echamos de menos el compromiso de un Gobierno que entienda la importancia del automóvil en nuestra economía”
Como continuación de la serie de entrevistas de La Quincena, en plena metamorfosis socio-laboral a consecuencia de la enfermedad Covid-19, dirigidas a representantes de asociaciones vinculadas a dos de los prioritarios motores de la economía, española y madrileña, como turismo y automoción; hoy pulsamos la del sector del automóvil.
Y lo hacemos con la intervención de Carlos Bustillo Del Río, presidente de la Asociación Madrileña de Distribuidores de Automóviles (AMDA), quien analiza y valora la actual situación en su sector.
Un sector que es el tercero industrial del país, que viene de caer a mínimos históricos en abril en cuanto a producción y exportación de automóviles, debido al cierre de factorías.
Abril y mayo de este año aportan la peor cifra de matriculaciones de la serie histórica que controla Anfac (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones), sólo equiparables a los pésimos datos de septiembre de 2012.
En los cinco primeros meses de 2020, en España se ha matriculado un 54,2% menos de turismos que en el mismo periodo de 2019, ejercicio que no gozaba precisamente de óptimos datos. La caída en vehículos comerciales ligeros es del 51,2%, mientras que la de vehículos industriales y autobuses se cifra en 34,2%, llegando a ser del 54,9% sólo en autocares y autobuses. En abril, hasta las ventas de automóviles usados descendieron un 89%.
En estos cinco meses, el canal más paralizado, obviamente, es el de alquiladores ante la ausencia de turismo.
Tras el periodo enero-mayo, las matriculaciones de automóviles han caído (respecto al mismo periodo del año anterior) en todas las comunidades autónomas entre el 47,6 % de La Rioja y el 63,6% de Baleares.
La Comunidad de Madrid, pese a experimentar un descenso del 53,2% en este tiempo (respecto a 2019), copa el 40,6% de la cuota del mercado nacional, seguida por Cataluña, con un 13,8%.
El empleo directo que genera el sector de automoción en España afecta a más de medio millón de familias.
¿Qué suele aportar el sector del automóvil al PIB y al empleo en la Comunidad de Madrid?
“El sector del automóvil representa un 10% del PIB nacional. Y los concesionarios en toda España generan más de 160.000 empleos directos, siendo su aportación al PIB nacional del 3,1%, con una facturación de 43.000 millones de euros. La Comunidad de Madrid supone, aproximadamente, el 40% de todo esto”.
¿Considera que la actual es la mayor crisis a la que se enfrenta el sector del automóvil? ¿Por qué?
“Sin lugar a dudas. Nunca en la historia se había generado un parón obligado de la actividad que no fuese provocado por una guerra. Y eso es lo que acabamos de experimentar, un parón en la actividad de varios meses en los que hay que soportar gastos estructurales sin poder generar ningún ingreso. Lo peor que le puede pasar a una empresa. A esto hay que unir la incertidumbre de una transición energética, que ya por sí sola estaba generando muchas dudas a los clientes de vehículos. Una penalización del vehículo diésel a favor de movilidades alternativas como los híbridos y los eléctricos, mucho más caros y sin estructura básica de recarga rápida, que no generaban la suficiente confianza para que la clientela se decidiera para cambiar de coche. Con todo ello tendremos que lidiar en esta difícil reapertura de los concesionarios”.
¿Qué estima que se va a llevar esta crisis por delante, en su sector?
“Lamentablemente, y salvo que el Gobierno comience a trabajar con nosotros de forma inmediata para que lleguen las ventas a la mayor brevedad posible, creemos que muchos concesionarios que tenían su rentabilidad comprometida, tendrán que cerrar”.
¿Qué es lo que más echa de menos, en lo profesional, en esta situación?
“Echamos de menos el compromiso de un Gobierno que entienda la importancia del automóvil en nuestra economía. Fabricamos coches en España y somos uno de los mercados más importantes de Europa. Cuidar del automóvil es cuidar de uno de los primeros sectores industriales del país”.
¿Qué sintió y cómo cree que le ha afectado al sector la suspensión del Mobility Car Experience o Salón del Automóvil de Madrid?
“La misma que perder el Salón de Ginebra o el de Frankfurt. Es una oportunidad más de exposición y de contacto con el público, pero que en negocio no es clave ni significativo para nuestra cuenta de resultados. Sin embargo, para las marcas es un ‘must’ acudir a la cita”.
¿Cómo cree que va a ser la vuelta a la actividad plena del negocio y cómo desearía que fuera?
“No podrá ser antes de que se supere por completo la Covid-19. La llegada de una vacuna va a ser clave en nuestra actividad. Pero, en nuestro caso, no será completa hasta que no tengamos un plan del Gobierno de ayudas de achatarramiento del parque más antiguo, de una apuesta por una red de recarga de vehículos eléctricos y un plan específico para la transición al vehículo ecológico”.
Desde el punto de vista de resultados en su segmento ¿cómo espera y desea que transcurra el segundo semestre del año? ¿De qué tipo de iniciativas dependerá su progresión o recuperación?
“Esperamos una pronta recuperación, que retorne la confianza al mercado. Aunque el segundo semestre va a estar influenciado por cómo se comporten otros mercados, en especial el turismo, del que depende el rent a car. No obstante, el vehículo de ocasión se comportará mejor que el VN (vehículo nuevo) en esta primera fase”.
Si dependiera de usted (de su asociación), ¿cómo salvaría lo que queda de campaña 2020? ¿Cuáles serían las prioridades para favorecer a la mayoría de establecimientos y de clientes?
“Como hemos dicho, lo principal es que el Gobierno no sea conservador y apueste de manera decidida y sin reservas por un plan de ayudas a la compra de vehículos catalogados como eco y cero, pero sin penalizar al diésel como hizo anteriormente”.